27 enero 2011
Este nuevo plazo está enmarcado dentro de la directiva para la protección de los derechos de los consumidores, y dobla el periodo estipulado por la actual normativa española
Además, las tiendas virtuales adquieren una serie de obligaciones respecto a sus clientes: informar sobre las características del producto, costes de envío e impuestos adicionales que puedan aplicarse y que el comprador no estará obligado a pagar si no es informado previamente, como norma general. En el caso de que el producto llegue tarde o dañado, el cliente podrá devolverlo y exigir el abono del dinero invertido.
Además, la nueva legislación prohíbe a los portales incluir casillas marcadas automáticamente en las compras para evitar que el consumidor pague costes adicionales involuntariamente.