11 abril 2007
Internet ofrece la posibilidad de comparar precios y productos en diversos comercios sin salir de casa. Una nueva raza de usuarios, los smart-shoppers o compradores inteligentes, aprovechan estas ventajas para adquirir los mejores productos a precios excepcionales.
El nuevo desarrollo de grandes superficies comerciales en las zonas urbanas del país hace que los consumidores españoles tengamos una enorme variedad de establecimientos en los que poder elegir ciertos productos. Sin embargo, existe una nueva categoría de compradores que además de sopesar todas las opciones locales se están especializando en conseguir lo mejor al mejor precio en cualquier lugar del mundo, son los integrantes de la teoría del smart-shopping.
A través de Internet cualquier internauta puede acceder a comercios de todo el mundo y buscar un producto específico. Esto ha permitido que el consumidor inteligente utilice los grandes ¿category killers¿ como Mediamark, Ikea, Carrefour , El Corte Inglés o cualquiera de las tiendas especializadas del entorno como elementos formativos y base de sus consultas con el fin de reunir toda la información necesaria para al final realizar la compra en el establecimiento donde la política de precios sea más ventajosa. Para los smart-shoppers las frases como ¿Yo no soy tonto¿ o ¿Yo sí sé comprar¿ han pasado de moda mucho antes de nacer.
Los compradores inteligentes de artículos punteros basan sus estudios en diferentes estrategias, analizan las ventajas y desventajas de varios comercios (producto, atención al cliente, formas de pago, etc.) y realizan una tabla de presupuestos para comparar las diferentes ofertas antes de tomar cualquier decisión. Para facilitar este análisis, en los últimos años han ido apareciendo en Internet diversos sites que actúan como comparadores de precios, localizando los proveedores de un producto y obteniendo su precio de una base de datos o un buscador. Entre los comparadores más conocidos se encuentran Kelkoo y Código barras o Froogle (sólo en inglés).
El estudio Mediascope 2006 realizado por la Asociación Europea de Publicidad Interactiva (EIAA) sobre tendencias de consumo y compra de los europeos a través de internet ha detectado que existe un número creciente de compradores inteligentes on line que se apoyan en estos comparadores de precios, incluso suscribe que en países como Holanda o Francia más de la mitad de sus compradores los consultaron al menos una vez al mes. Sin duda constituyen una nueva visión de las tradicionales rebajas u ofertas.
Si un consumidor desea convertirse en un smart-shopper o comprador inteligente tendrá que seguir las siguientes premisas: